Cavitación

La Cavitación es un tratamiento estético que ofrece las bondades de la liposucción sin necesidad de pasar por el bisturí. La técnica se lleva a cabo a través de un aparato de ultrasonido especial que permite crear burbujas en el tejido graso para luego reventarlas y liberar el contenido de las células grasas a través del sistema linfático.

Es un tratamiento que requiere más de una sesión y la cantidad de aplicaciones dependerá de las necesidades de cada persona. Esta técnica, que es indolora y no invasiva, solo debe ser realizada por un especialista en medicina estética.

Principales beneficios de Cavitación

Combate la grasa		Reduce las medidas corporales
Mejora la apariencia de la celulitis		Estimula la circulación sanguínea
Mejora la circulación sanguínea		Combate la flacidez
Ausencia de dolor		Tratamiento no invasivo
Técnica sin efecto secundario

La cavitación, a diferencia de otros tratamientos, cuenta con el beneficio de ofrecer resultados desde la primera sesión, pues la quema de grasas comienza su proceso desde el primer momento en que el ultrasonido entra en contacto con la piel. Después de una sesión de cavitación la persona deberá tomar abundante agua, lo cual ayuda al organismo a deshacerse más fácilmente de la grasa localizada.

Si se acompaña con radiofrecuencia, la cavitación puede ayudar a potenciar la mejoría de la piel permitiendo combatir flacidez. Ambas técnicas en conjunto representan un dúo perfecto para tratar la piel durante la pérdida de peso permitiendo reafirmarla y hacerla más resistente a la gravedad.